Desde El Ciruelo sabemos bien lo que nos gustan a todos las cerezas, un sabor característico de la llegada del calor y que nos recuerda los primeros momentos del verano. Su temporada desde principios de abril hasta mediados de julio, y es uno de los sabores que más gustan a pequeños y grandes. Además de un sabor delicioso y de alto contenido en minerales y vitaminas, las cerezas contienen todos los beneficios de los frutos rojos y están cargadas de antioxidantes que contribuyen a la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes y neurodegenerativas como el Alzheimer.
Nuestra empresa está comprometida con el bienestar ambiental y por eso respetamos los procesos de crecimiento y el cultivo de las cerezas y el resto de las frutas que cultivamos. Pero eso no significa que no podamos disfrutar del sabor de las cerezas durante todo el año, y con nuestra fantástica receta de cerezas al marrasquino podréis hacerlo con un sabor intenso para comerlas cuando nos apetezcan.
El origen de la receta de cerezas al marrasquino
Las cerezas al marrasquino son un tipo de conserva que originariamente se elaboraba con cerezas y licor de marrasquino (una especie de cerezas), y empezó a elaborarse hace más de 200 años, en el área geográfica que hoy ocupan el norte de Italia y Croacia, lo que en la Antigüedad se conocía como Dalmacia. Esta receta la realizaban los comerciantes y agricultores para conservar esta fruta durante todo el año y darle un toque único que lo hacía muy atractivo en las zonas urbanas en las que llegaban con mayor dificultad los productos frescos del campo.
En la actualidad contamos con una conserva que ha sustituido el azucarado licor por un almíbar al que podéis elegir o no, agregarle una pequeña copa de algún licor azucarado como es el brandy o el mismo licor de marrasquino. Sea cual sea vuestra decisión os aseguramos que el resultado será inmejorable.
Ingredientes para esta receta de cerezas al marrasquino (2 tarros estilo mermelada, 250 ml cada uno):
- 2 frascos de cristal o vidrio de aproximadamente 250 ml. de capacidad (pueden ser algo más grande, solo tendremos que añadir más almíbar y listo, también podemos utilizar uno solo de medio litro).
- 400 gramos de cerezas de El Ciruelo
- 150 ml de agua.
- 250 gramos de azúcar blanca.
- 50 ml de licor de Marrasquino o Brandy (opcional)
Pasos en la preparación de las cerezas al marrasquino:
- Paso 1. Lo primero será limpiar y esterilizar bien los frascos que utilizaremos a la hora de almacenar nuestras cerezas, para ello lavaremos con abundante agua y jabón. Posteriormente introducirlos en una olla o cazo, cubierta por trapos para evitar que se rompan al hervir y dejarlos sumergidos y abiertos en agua hirviendo durante al menos 10 minutos. Este es el método tradicional que durante siglos se ha utilizado para esterilizar y eliminar cualquier bacteria a la hora de esterilizar un frasco. Os recomendamos que no apartéis los trapos para lavar todavía, posteriormente los necesitaremos.
- Paso 2. En otra olla o cazo añadiremos el agua y el azúcar y llevaremos a ebullición para que se fundan completamente, dejándolo cocinar durante algunos minutos hasta que veamos que no queda ningún cristal de azúcar en el recipiente y dejara fuego bajo para que no se enfríe en ningún momento.
- Paso 3. Elegiremos cerezas no demasiado maduras, que estén enteras y que no tengan ninguna picadura o daño, las lavaremos bien y las secaremos, en este momento os recomendamos extraerles el hueso con ayuda de un cuchillo de filo, si se rompen algo no importa. Retirarles el hueso es importante para evitar que este agregue un sabor amargo a la elaboración y facilitando luego su consumo. Os recomendamos utilizar cerezas de El Ciruelo dado que son una apuesta segura en cuanto a calidad y origen, y han sido cosechadas en el momento exacto para que puedas disfrutar de todo su sabor.
- Paso 4. Añadiremos las cerezas y las dejaremos cocinando durante un mínimo de media hora, en este momento podemos añadir algún elemento que le de sabor para personalizarlas, puede ser alguna especia (vaina de vainilla, corteza de canela, etc.) o incluso alguna otra fruta (zumo de limón o corteza de naranja), dejemos que vuele la imaginación. Este es el momento de añadir el licor si hemos decidido agregarlo.
- Paso 5. Retiraremos solo las cerezas, dejando el almíbar en la olla y llenando los tarros con ellas, una vez saquemos todas las cerezas agregaremos el almíbar de la olla hasta llegar casi al borde de los tarros. Cerraremos bien los tarros y los devolveremos a la primera olla junto a los trapos para esterilizarlos y envarsar al vacío. Dejaremos que hiervan durante media hora más para asegurarnos de que se genera en su interior una atmósfera protectora que nos permitirá consumirlos dentro de mucho tiempo.
- Paso 6. Pasada esta media hora retiraremos del agua los tarros con cuidado de no quemarnos y los dejaremos enfriar en la cocina durante media hora apoyados sobre su tapa. Una vez fríos los introduciremos en la nevera donde deben macerar durante al menos 6 semanas. La “fecha de caducidad” de una conserva casera no está clara, nosotros os recomendamos consumirlo en un plazo máximo de 9 meses, y una vez abierto conservarlo siempre en la nevera.
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